Cómo modificar la pensión de alimentos

La cantidad y los tipos de gastos a los que tiene que hacer frente cada progenitor están fijados en las medidas definitivas recogidas en una sentencia de divorcio o separación. Para modificarlas es necesario que se dicte una nueva sentencia. Es por este motivo que si uno de los progenitores decide no pagarla, estaría incumpliendo una sentencia firme, y podría suponer un delito. Para modificar la pensión de alimentos establecida en una sentencia de divorcio o separación es necesario interponer una demanda de modificación de medidas definitivas ante el juzgado de primera instancia. Deben cumplirse una serie de requisitos para justificar que la variación es necesaria y no se hace simplemente por el interés del solicitante, como por ejemplo acreditar un despido o falta de ingresos suficientes. En el caso de que te encuentres desempleado, puedes consultar el artículo Cómo modificar la pensión de alimentos si estoy en el paro.

La pensión de alimentos impuesta a favor de un hijo puede variar a lo largo del tiempo. Durante la etapa de crecimiento, los hijos van asumiendo nuevas necesidades y roles sociales que implican un gasto económico, así como la cantidad de comida que consumen o el tipo de ropa que utilizan.

Esto implica gastos que antes no estaban incluidos en la pensión de alimentos inicial y que deben ser incluidos para que ambos progenitores los paguen de forma proporcional.

Hay que señalar que la pensión de alimentos no solo puede ser revisada a la alta, sino que también puede pedirse una rebaja de la cantidad a pagar. Las necesidades del menor tienen que ser cubiertas siempre pensando en su interés, pero también teniendo en cuenta la capacidad económica del progenitor.

De esta manera, se puede interponer una demanda de modificación de medidas para cambiar o suprimir la pensión de alimentos siempre que uno de los progenitores haya sufrido una bajada notable de su nivel de ingresos. Si el progenitor se queda sin ingresos, porque ha perdido su trabajo o finaliza su prestación por desempleo, puede llegar a suspender el pago de la pensión, pero en cuanto vuelvan a mejorar sus ingresos, tiene que volver a pagarla.

La pensión de alimentos se sigue pagando mientras el hijo siga estudiando y no sea económicamente independiente. Esto quiere decir que si el hijo alcanza la mayoría de edad y sigue estudiando, pero sin trabajo o ingresos que lo puedan mantener, el progenitor tiene la obligación de seguir pagando la pensión de alimentos que se fija en la sentencia. Aún así, la ley establece una serie de límites en este sentido.

La demanda de modificación de la pensión de alimentos se se puede presentar ante el juez mientras dure la vigencia de la pensión.

De forma excepcional, los jueces conceden el cobro de la pensión de alimentos retroactiva, es decir, que uno de los progenitores tenga que hacerse cargo de los gastos del menor desde antes de interponer la demanda para pedirla.

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